BARUA

ESPERADO REENCUENTRO

Sencillez, juventud y elegancia, todo ello sumado a las ganas y fuerza que despierta la idea de pasarlo bien con la música. Es así como BARUA comenzó su andadura para años después volver con «El Reencuentro» un disco de rock sencillo, melódico y pegadizo, de los de pasar un buen rato y disfrutar con sus temas. Simple y efectivo, tanto como las respuestas a nuestras preguntas.

Unos cuantos años escondidos sin tener material nuevo, un cambio en el seno de la formación y nuevas ideas, ¿en qué habéis andado metidos?
En muchas cosas… al acabar la anterior gira decidimos parar. Llevábamos mucho tiempo tocando el mismo repertorio y nos apetecía cambiar de aires durante un tiempo. Hasta que no salieran canciones que nos apeteciese meter en un disco no íbamos a tocar. Así que nos lo tomamos con calma hasta que ha salido El Reencuentro. En cuanto a los cambios en la banda es ley de vida. Xabi andaba metido en otras historias y al ver que podía frenar al grupo se bajo del carro, sin malos royos ni nada, igual por eso, nos da más pena.

Con el final de año y una crisis que ha ido a peor, en todos los sentidos, a nivel musical, ¿estamos peor o mejor que cuando “Sin que duerman las horas”?
Para nosotros musicalmente sigue siendo lo mismo casi desde que empezamos, no tenemos recuerdo de que la música haya estado bien, o eso nos han dicho siempre. Lo único que notamos es que para los que manejaban el cotarro el chollo se ha acabado, y el grifo se les ha cerrado. Pero eso es problema de ellos. Cuando todo iba “bien” compañías y multinacionales se forraban y todo iba de puta madre ellos no se preocupaban más que de su ombligo. Ahora que les va mal y lloran no vemos que tengamos que preocuparnos mucho por ellos. Cada uno a lo suyo.

¿En qué momento os encontráis como banda? ¿Ha sido difícil sacar la cabeza y llegar hasta el día de hoy, con un buen segundo disco bajo el brazo?
En un momento cojonudo. A pesar de las bajas que hemos tenido la banda suena como antes o incluso mejor, mucho más compacto. En ese sentido Tote (el nuevo bajista) ha sido fundamental, es un tío que ha pateado muchos escenarios y es un perro viejo de la música. Y eso ayuda.
En cuanto a si ha sido difícil o no, pues no lo sabemos. Ha salido todo natural. En septiembre estábamos sin banda y ahora ya estamos sonando bien y haciendo conciertos.

Cierto es que el momento no es bueno, dadas las muchas bandas que se quejan de haber bajado afluencia de público y de ver cómo las giras se hacen más complicadas. ¿Misma ilusión y ganas que antes?
¡¡¡O más!!! Somos un grupo pequeño y para nosotros desde que nos fuimos pocas cosas han cambiado. Todo lo que venga bienvenido sea. Durante los ensayos nos lo estamos pasando en grande, estamos disfrutando mucho. Sólo por eso ya nos merece la pena seguir tocando. A partir de ahí cuanto más se pueda tocar mejor.

“El Reencuentro”, buen título para el disco, es un reencuentro con vosotros mismos, con los fans, con los que puedan venir…
Un reencuentro con todos. Durante estos tres años muchos amigos nos decían haber cuando sacábamos disco, haber cuando tocábamos en algún sitio. Casi es un reencuentro con ellos por no haberse olvidado de nosotros en todo este tiempo.

En cuanto a las canciones, ?de qué nos hablan en términos generales? Creo que son temas cercanos, con los que puedes conectar fácilmente, ¿qué opináis?
Es un disco que refleja todo lo que hemos vivido desde el anterior disco hasta este. El cambio de vida de algunos de la banda, la pérdida de personas cercanas, la puta crisis que nos ha dejado en paro a más de uno, las juergas… de todo un poco.

Nuevamente Javi San Martín a la producción, ¿resulta cómodo trabajar con él?
No conocemos otra manera. Desde que llegamos a Sonido XXI con el primer disco el buen rollo fue instantáneo. Además lo tenemos en casa. Le vemos bastante a menudo. Es parte fundamental de BARUA y sin él, estos dos discos no hubieran sido lo mismo. Él tiene la última palabra en todo, tiene la virtud de ver el disco en su conjunto incluso antes de estar grabado, y si te tiene que decir que algo que has llevado al estudio, o algún arreglo es una mierda te lo dice. Para nosotros es el mejor.

Portada y contraportada en forma de teatro, ¿qué buscabais?
Nos pareció gracioso lo del teatro. Al final de todo el grabar un disco, el ensayar día si y otro también, el hacer kilómetros o malabarismos con horarios del curro… todo te lleva a un sitio: el escenario.

Muchos años como banda pero pocos discos, ¿son tiempos difíciles para la música?
Hemos intentado ser honestos. No sabemos si lo hemos conseguido o no (risas). Tardamos cinco años en sacar el primer disco, pero si lo hubiéramos sacado el primer año hubiera sido una cagada, porque tocábamos como el culo. Si grabábamos algo lo colgábamos en internet directamente, para que todo el mundo lo tuviera. Nos parecía que si vendíamos una maqueta íbamos a engañar a la gente. Solo cuando vimos que podíamos grabar decentemente y tocar medio decentemente hicimos el primer disco. Y con este pasa lo mismo, hasta que no nos han gustado las canciones del disco no las hemos grabado, y aun así hemos tardado un año en sacarlo desde que la masterización fue acabada.

¿Amigos o enemigos de Internet? ¿Sois usuarios habituales de las redes sociales de cara a promocionar la banda?
Internet ahora mismo es lo que más se usa para promocionarse un grupo pequeño. Casi toda la promoción nuestra, al margen de la que hace El GRINGO, la hemos hecho por redes sociales, y la verdad es que si que se llega a bastante gente. Pero es como todo, una campaña de promoción por internet no puede competir con las promos que se hacen en televisiones, radios… que encima valen un pastón.

¿Cómo se encuentra la escena musical en vuestra zona?
La verdad es que el abanico se ha abierto mucho. Hace unos años casi todo lo que se hacía era rock en sus diferentes estilos. Ahora cada vez hay más pop, folk, rap, indie, grupos más metaleros, hardrockeros… hay un abanico más amplio, y además de eso la peña se lo curra mucho y el nivel es muy alto.

¿Cómo llega vuestro acuerdo con El Gringo?
Cuando teníamos el disco ya terminado ocurrió lo de siempre. Empiezas a moverlo para ver si a alguien le interesa sacarlo. Pasa lo de siempre. En principio el disco gustaba mucho pero a algunos no lo suficiente como para sacarlo y darle bola y otros nos decían que sí, pero que mejor hablarlo “la semana que viene”. A Gussy y Lucas de El GRINGO los conocemos desde hace bastantes años. Son músicos, se han pateado baretos y salas por casi todo el estado, y saben de que va el tema. Nos ofrecían lo mismo que el resto, pero su labor no acaba cuando sacan el disco. La implicación y el cariño que le ponen es total. Y encima tienes la confianza de que son amigos.

En cuanto a la gira, ¿tenéis ya planes o fechas cerradas?
De momento nos van saliendo cosillas. Ya hemos hecho tres conciertos y los tres han salido bastante bien en cuanto a respuesta de la gente. Todavía estamos cerrando fechas para el 2012, y esperemos que salgan más cosas para poder anunciarlas bien.

Ahora que ha comenzado 2012 ¿qué le pedís al nuevo año?
Tocar. Cuanto más mejor.

¿Algún concierto en vuestra carrera que olvidar o al revés, que guardar para siempre?
Conciertos para olvidar o para recordar siempre los hay. Quizás los más bonitos han sido el que dimos de teloneros de Barricada el día 6 de Julio en San Fermines hace unos años, o el concierto de presentación del disco que dimos en Pamplona el 30 de Diciembre.

Además del cambio evidente de componente, ¿qué hay de diferente en Barua con respecto a 2008?
Seguimos siendo los mismos de siempre. Solo que ahora rozamos las treintena, alguno hemos perdido pelo o ganado kilos…

¿Algo que os gustaría añadir para terminar?
Pues nada. Un saludico desde tierras navarras para la gente de RockTotal y recordaros que Tote (el nuevo bajista) vende su seat Panda.

Miguel Rivera