BERRI TXARRAK

BERRI TXARRAK 

15/04/2018

La Riviera, Madrid

Empiezan a escasear los calificativos para definir la historia de BERRI TXARRAK, una de las bandas más aclamadas cantando en euskera que ha abierto puertas y más puertas, tirando pensamientos y viajando por medio mundo para presentar su legado.

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Sus directos les sirven de comodín para ser reclamo de grandes festivales donde son baza segura de éxito. La banda liderada por Gorka Urbizu continúa imparable una escalada musical que, un año después, volvía a colgar el sold out en un escenario madrileño de altura como La Riviera.

Así, sin despeinarse volvían con otro estupendo nuevo trabajo «Infrasoinuak». Con quince minutos de retraso sobre la hora marcada el potente trío salía a escena dispuesto a darlo todo y por delante esperaban, para sorpresa de muchos, más de dos horas de músculo musical del que pocos son capaces.

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Calificativos como energía, constancia, convicción, soltura y altura de miras vendrían a ser perfectos para definir lo que es BERRI en directo. Su gente lo sabía, y desde el primer momento brazos en alto y saltos para disfrutar a lo bestia, con un gran sonido de «Bradararen bat» «Zuri» y su «Infrasoinuak» tema que da título a su nueva ristra enérgica y melódica.

Una banda capaz de gustar gracias a temas muy melódicos que directo les convierte en una especie de tres leones sueltos en su propia selva musical. Coros que acompañaban incluso en momentos complicados, esos que acompañarían tras la salida de foso de los fotógrafos con «Isiltzen banaiz» y «Bueltatzen» en las que, por algún problema, tuvimos que disfrutar a oscuras sobre escenario.

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Ahí es donde podemos ver, como cuando fallan las imágenes en un informativo, las tablas de la formación. Los tres continuaron como si nada, y el público respondió a lo grande, acompañando con la misma fiesta y «golpes» ante el derroche enérgico musical. Poco importaba si bien decidían parar antes de «Izena» solo un par de minutos, los que sirvieron para subsanar el problema que, David quiso agradecer al público de corazón.

Si ya de por sí son bestias tiraron de más energía «Beude» y lo melódico de «Spoiler» uno de esos temas que funcionaron en disco y que en directo son canela. «Libre» para la que Gorka pedía se «escuche en Iruña».

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Magia apuntillada por la fuerte presencia de sus tres miembros y con Gorka y David subidos en la plataforma de la batería para darle mayor enjundia a los finales. La base de una banda cuya frescura y originalidad se basa en la evolución mostrando siempre su base original.

En temas como «Folklore» La Riviera se volvía loca, y daban la sorpresa en «Aditu» para la que contaban con Marilia (ex ella baila sola) versionando el tema y que al grupo le gustó por lo que, y siendo de Madrid, tuvieron el detalle de invitar a cantar junto a Gorka. Muy aplaudido el momento.

«Denbora poligrafo bakarra» es el ejemplo perfecto de su evolución constante, músculo directo «Ikasten» y «Hozkia» con guiños a Metallica en su «Master of puppets» a lo que Gorka preguntaba si teníamos un «master» acompañado al grito de «sin vergüenzas», muy aplaudido.

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Temas como «Lobby» y «Kop» servían de recta final imponente, todo bajo pocas palabras y sonido directo, pulido, de una banda que no dice mucho y lo da todo. Una presencia y sonido que ya querrían muchas formaciones de fuera, todo en una recta final de infarto. Nadie se movía de su lugar, pasábamos de las dos horas de fuego rockero para ahondar en temazos como «Zaldi», «Oreka» e «Ikusi arte» impecables, con la gente disfrutando alocadamente.

Y así, dando las gracias, recordando que nos estamos acostumbrando a llenar La Riviera con ellos, atacaban con «Denak» y «Katedral» para dejar el listón tan alto como les conocemos, algo habitual, algo a lo que ellos SÍ nos han acostumbrado.

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Son muy pocas las bandas capaces de ofrecer un directo de tanta energía, de unos 40 temas y de recibir una respuesta en la que canta casi todo un recinto, y en euskera, y en alto, y disfrutando. No, no todos los días podemos encontrarnos con una profesionalidad, talla y músculo rock como el que BERRI TXARRAK demuestra en cada concierto, Y ya son muchos años. Larga vida al talento.

Texto: Miguel Rivera

Fotos: Mariano Regidor