THE REBELS

MAFIA DEL ROCK

«Mafia» es uno de esos discos del rock nacional que debe estar entre lo mejor del año que acaba. Una lección grunge liderada por Álex a la voz, con quien estuvimos en persona charlando de lo que acontece alrededor del disco y la banda. Un grupo totalmente recomendado.

the rebels

Antes de que se publicara «Mafia» salieron 4 temas de 10, ¿qué os lleva a soltar casi la mitad del álbum como anticipos?

Álex:  Creo en los tiempos  que corren, donde han pasado dos años desde que básicamente terminamos la gira, era necesario ir soltando canciones tras tanto tiempo, y así pulsar el recibimiento. Estuvimos siete meses grabando bajo un método de producción que he llevado a cabo como productor donde hemos disfrutado mucho.

Tras haber puesto todo ese cariño en el disco y tras tanto tiempo sin sacar ni hacer nada, quisimos invertir en cuatro videoclips antes de la vida del disco, donde al hacerlo todo junto no era tan caro como hacerlos en diversos momentos. Todo ello se ofreció el proyecto a Roberto Peromingo a quien le encantó la idea.

Sacando los 4 singles en un disco menos comercial pero más profundo, pensé que igual la gente podría disfrutar tras tanto tiempo sin Rebels hasta que saliera el disco generando un interés por escuchar el resto. Todo eso sacando el disco muchas veces se queda en 1 o 2 singles y era algo que no quería, porque es un disco para disfrutar completo.

También así creas un feedback más completo.

Sí, sinceramente en cuestión de dos semanas hubo más de 2000 escuchas en Spotify y muy buena acogida de estos singles, tanto por parte de los medios como por el del público. Buena venta de entradas y mucho merchand, así que creemos que ha sido una buena jugada.

Hablando de eso, ofrecéis packs diferentes, ¿es algo necesario en estos tiempos de lo digital?

Los que somos fans de grupos siempre mola tener cosillas diversas de ellos. Las bandas sobrevivimos básicamente de lo poco que dan los conciertos, de algún festival pero también mucho de vender merchan a lo largo de la gira. Es más, cuando vuelves de gira se cubren gastos por esa venta, es importante y además mola para el público y artista. Nosotros mimamos todo ese aspecto, a mi cuando llega el material me da gustito (risas).

La escucha que hicísteis previa al disco con fans y medios siempre es algo bonito.

Sin duda. Era para los 10 primeros que compraron el vinilo y medios. Fue una experiencia muy familiar. No lo hicimos en sí para ver la reacción de la gente, nos apetecía porque disfrutamos mucho haciendo las cosas en Estudio 1 y la gente de allí son como hermanos. Nos parecía algo divertido para aunarlo todo en un día y un sitio. Un catering, unas cervezas y disfrutar en familia poniendo todo el disco.

Con algunas fechas cerradas de directo, ¿pensáis mucho en ello para evitar perder pasta?

Sí, esto se ha derivado a Red Fox nuestra agencia de management. No queremos aparentar y vas a hacer fans con cuidado. Miras esos aspectos para que puedas de verdad hacer piña y gente hacia tu música.

Meterse en festivales imagino es complicado.

Al final es muy complicado, hay  cada día más bandas y oferta y no hay espacio para todos. Los festivales tienen muchas veces un target muy definido y se basa en el interés que generes, es difícil. Hay más eventos y es de agradecer pero hay muchas bandas para elegir.

¿Las mayores influencias serían Nirvana y Foo Fighters?

Te soy sincero. Me encanta Nirvana, Foo fighters me gusta, con algunos temazos y muy buenos discos iniciales, pero no me emociona como influencia directa, no me ha calado hasta ese punto como sí lo ha hecho Nirvana, Green Day, Police, John Lennon o The Beattles. Las bandas de Seattle que más me han calado son de toque punk como Mudhoney.

El día que sale un disco ¿cómo se vive?

Es un día en el que todo tu trabajo, en este caso de dos años, se abre al público y se libera. Sinceramente, en The Rebels no miramos la reacción tan inmediata, prefiero verlo cuando pasa un mes. El día del lanzamiento es un día de desahogo y que la gente lo disfrute es como un polvo cuando te corres.

Lo hablaba hace poco con otras bandas, ahora mismo relevo de estadio en lo musical no tenemos, algo triste.

Pues sí, creo que no hay relevo de los grandes gigantes del rock. Creo que no habrá bandas de estadio, al menos de momento. Vivimos una época de fast food o fast music, fast todo… Todo es rápido, no hay espacio para esos fenómenos. Esos grupos existen porque había más tiempo para escuchar un disco completo y darte cuenta de lo buenos que eran los grupos y con ello, hacer masas. Te sentías identificado a lo largo de diez u once temas con mucha más gente, y ahora, al contrario, no prestamos tanta atención hacia disco o banda y ahora no se genera ese culto de antaño.

Es como un restaurante, donde ahora te dicen «coja una mesa, coma y deje paso rápido a los siguientes», y eso en la música lo hemos aceptado. Pero bueno, ojalá la cosa cambie. También hay bandas independientes que al revés, de pronto grupos como Toundra llenan Rivieras, ese tipo de fenómenos más pequeños también existen, hay que verlo y esperar que se multiplique.

¿Sigue habiendo espacio para el rock en España?

Sí que lo hay, pero ha pasado de ser algo mainstream a algo para unos pocos, como el jazz. Lo que predomina en el mundo es el reggaetón, y eso es lo que el mundo consume. El hecho de que la cultura no esté promovida por gobiernos hace que lleguemos a estos términos, donde se dice culo, pedo, pis, como los niños en el colegio. Sin cultura, machista y abrasivo, y así es como estamos, pero lo que es verdad es que lo consume el mundo entero.

Miguel Rivera