SÔBER

SEGUNDA CONSOLIDACIÓN

Tras el necesario parón en la vida de SÔBER para dar vida a nuevos proyectos, la formación decidió reunirse para dar comienzo a una segunda etapa más que prometedora. Una pequeña gira para encontrarse de nuevo con sus fans y ahora el esperado regreso de estudio en forma de “Superbia” un nuevo trabajo que consolida nuevamente a SÔBER como una de las referencias clave para entender el metal nacional actual. Carlos Escobedo habló con nosotros dejando claro su entusiasmo y ganas ante esta nueva etapa «soberana».

Háblame un poco el balance de la gira de reunión.

Pues muy positivo, cuando arrancamos con la idea de volver no éramos conscientes realmente de la espera de la gente hacia el grupo. Aunque nos tomáramos el descanso o separación, según quieras llamarlo, el grupo nunca ha estado muerto, la gente proponía a Sôber y seguía escuchándonos, estaba en la cabeza de muchos y eso se ha visto en la gira y las ganas de vernos en directo. Además hemos hecho conciertos que hemos querido y dejado de lado algunos festivales donde el todo vale, por respeto a los fans y poder vernos en condiciones normales. Las salas han ido de maravilla y el público mejor, una guinda para el pastel.

“Superbia”, curioso título ¿de dónde surge?

Es la canción con la que abrimos el disco, resumen didáctico de lo que queríamos mostrar, era una reflexión de hacia dónde va el ser humano. Viene del latín, es la soberbia que se refleja en ciertas frases del tema, la misma lleva a la destrucción del ser humano, detonante donde todo se destruye y se corrompe. Es todo muy social, se refiere hacia dónde nos dirigimos y lo que vemos en el día a día, el cambio climático, los bosques, destrucción… nos gustaba esa idea que los textos tuvieran un concepto claro pero que la canción que da nombre fuera más social.

En cuanto a la unión del grupo, tras cinco años de separación ¿cómo os encontráis?

Pues en un momento muy dulce. Esta parada ha sido básica y me ratifico en que fue fundamental para que Sôber volviera a tener vida. O lo tienes muy claro o necesitas refrescarte cuando llevas años con mucha intensidad, y ha sido vital para darnos alas y seguir desde otro punto de vista y después juntarnos para decir cosas. Unos 25 temas, ilusiones e ideas son las que hacen estemos aquí de nuevo. Todo ha sido muy fluido y muy espontáneo. Arranca con un vídeo, un tema nuevo y un recopilatorio para ir viendo cómo funcionaba la máquina, que Manu conociera los temas de siempre y arrancando una gira con clásicos para después hacer nuevas canciones.

En mi opinión, este disco suena más moderno, ¿qué ofrece?

Pues la esencia de la banda pero por supuesto un pasito más allá, a nivel armónico, de riffs y sonido, un trabajo más rockero, de cómo sonaba la banda, al estilo de “Morfología”, porque un “Reddo” quizás saturaba las producciones porque era lo que nos pedía el cuerpo en ese momento, ahora buscábamos un un trabajo más directo. Le hemos dado a cada canción su ambiente, teníamos mucha experiencia y sabíamos cómo queríamos que sonara, junto a nuestro quinto elemento que es Alberto Seara a la producción, esa unión da una gran fuerza.

Termináis en Murcia, cuyo viaje ofrecimos aquí en forma de tour report y volvéis a comenzar esta nueva gira allí.

Murcia nos ha visto crecer como grupo, ciudad a la que tenemos mucho aprecio, su público siempre nos ha aportado un cariño especial. Para mucha gente es arriesgado por terminar en noviembre allí y arrancar de nuevo en la misma ciudad, pero era lo que queríamos, volver con el público que nos quiere tanto.

Para los que comienzan, ¿qué les dirías?

El pretender vivir de ello es complicado pero para el que quiere hacer cosas está en su mejor momento porque hay mucha tecnología que ayuda a la creatividad, antes trabajábamos con cuatro pistas y era una locura maquetar temas, ahora tienes más formas, posibilidades, información. A nivel panorama musical e industria ya sabemos que es el peor momento, y como no hay dinero por ventas no hay apuesta alguna, porque las compañías ahora te tiran como hace años podían hacer si no cantabas en castellano. Pero bueno, por muy complicado que esté hay que tener ganas.

¿No crees que las compañías se han acomodado demasiado?

Se han estancado mucho, mantienen la misma ideología intentando economizar y cuando la cuerda no estira hay que buscar otra, no reforzarla porque no nos lleva a nada, sino a sumar un punto y poco más. Deberían buscar una solución, cambio de formato, legislación pero algo.

Tras tantos años sin material nuevo, ahora que sale “Superbia”, ¿estáis nerviosos?

Sí, por supuesto, este disco lo afrontamos como el primero de la nueva etapa, es un aliciente más, de mucho trabajo y con ganas de saber qué le parecerá a la gente, tanto para los que nos conocen como las nuevas generaciones que no nos habían escuchado hasta que hemos vuelto. Verdaderamente hay mucha ilusión y nervios, ese gusanillo que tenías hace quince años, un vértigo muy interesante. Pero la respuesta al pequeño avance de YouTube ha sido realmente bueno, con más de 2000 visitas al día, nos dimos cuenta de la que se avecinaba, ansias de Sôber.

En lo que se refiere a los conciertos, ¿es difícil mantenerse y llevar al mismo número de público más aún con tanto festival?

Nosotros somos sinceros y sin sonar prepotente, hemos descartado festivales, decidimos ir a los que nos cuidan y hay parte sentimental, como el Sonisphere donde toca Iron Maiden, nos apetece y cuidan a las bandas y el aspecto técnico. Lo que no queremos es ir a cualquier festival, donde pagan poco y se trata muy mal todo. Prefiero hacer una sala en Galicia que un festival de 20000 personas en la zona donde igual tu público no está ahí y a su vez tocar en peores condiciones o no probar sonido.

Salís de Universal y ficháis con Last Tour, ¿os dan la carta de libertad y os ponéis a buscar?

Realmente con Universal teníamos un acuerdo para el recopilatorio. Las compañías o su gente van cambiando y llega un momento en el que no compartes nada con los que están, así que piensas “qué hago aquí”. Queríamos gente ilusionada como nosotros, incluso pensamos en la posibilidad de editar nuestro disco por nuestra cuenta, con la experiencia, contactos y conocimientos, trabajar en su distribución y sacarlo en tienda no nos asustaba. Al final fichamos por Last Tour que entiende el rock de forma soberbia. Había un interés compartido y una gran opción hasta tal punto que la persona que se ocupa del producto (Juan Velasco) trabajó con nosotros desde Muxxic cuando sacamos “Paradysso”. Hay infraestructura e ilusión y eso es importantísimo, un trato más personal que ayuda.

¿Hay interés por salir fuera?

Pues mucho, ya lo estamos intentando en Sudamérica y en Europa y con Last Tour había más facilidades, ya que funcionan a nivel internacional. Ahora queremos meternos en festivales de fuera, igual que aquí te comes bandas que no conoces porque van en paquetes. Queremos abrir fronteras y no sólo quedarnos en un concepto latino.

Miguel Rivera