DESAKATO + MISIVA

DESAKATO + MISIVA

19/10/2014

Sala Penélope, Madrid

Pocas noches podemos vivir como la de este pasado sábado en la sala Penélope de Madrid, y es que viendo la velada rockera que prestaron MISIVA y DESAKATO ya quisieran muchas bandas guiris de diverso calado poder conseguir directos y respuesta tan impactantes como la de estos jóvenes grupos asturianos.

Un tándem bien escogido, de dos de las formaciones más atractivas del panorama rockero nacional. Por un lado MISIVA, un claro ejemplo del punk melódico enérgico, reivindicativo y directo, ya sea en castellano o asturiano para dar cuenta de un último disco “Gran mentira” que es de lo mejor que ha pasado por redacción en su género.

De la otra banda en cuestión DESAKATO qué podemos decir. Se trata sin duda de ese relevo generacional musical que buscamos hace tiempo para cuando vayan desapareciendo las grandes formaciones metálicas de nuestro país. Todo es perfecto en ese engranaje asturiano de banda sólida, de temazos, de crudeza y melodía a partes iguales, de quienes conectan con su público y arrastran más público cada año. Claro ejemplo de lo que es comenzar de manera humilde e ir abriendo camino y subiendo peldaños para sobresalir en este difícil mundo.

Con este plantel quien podría resistirse a dejar pasar la oportunidad de una noche de actitud asturiana, con una sala Penélope que antes de las 21 horas contaba con mucha gente fuera aun hasta sonar los primeros acordes de MISIVA. “Planeta gris” sonaba regulera por la falta de público, algo que iría mejorando con la entrada poco a poco de un respetable que veinte minutos después abarrotaba la céntrica sala.

El conjunto reivindicativo y melódico de MISIVA es pura energía adictiva. El personal se iba animando con ellos, mientras pedían la respuesta del mismo. Una y otra vez Asturias saldría a relucir, mientras “Muros de soledad” o “Cartón” aunabanpotencia y velocidad, recordando la pose y vistosidad de grupos americanos del género.

Que son de Asturias quedaba claro tanto que pidieron “si no nos importaba” pasar a cantar sus temas en su lengua, reivindicando la misma bajo aplausos del público. Pasamos por tanto a una mitad de directo en su querido asturiano con el mismo ritmo impecable. “Mil colines” uno de los cortes más adictivos y pegajosos en disco y vivo en directo, coral y bien ejecutado. Su frontman Humberto convertido un torbellino que recorrió muchos metros sobre el escenario, la actitud muy “Green day” en forma y fondo de Diego al bajo y el resto conjuntado para ejecutar con brío “Aire nuevu” o la enérgica y reivindicativa “Revolución TV”.

Ya con una gran entrada y dando las gracias por el interés en verles sabedores de que Desakato era la banda estrella sonarían geniales dos de sus temas más directos “Cometes” y “Gran mentira” levantando interés y aplausos de los últimos en entrar, y dejando un gran sabor de boca para comenzar por parte de una de las bandas punteras dentro del punk melódico más directo.

Qué gran forma de comenzar para dar la bienvenida a DESAKATO. Algunos de vosotros “insensatos” puede que no los conozcáis aún, y ya tienen larga trayectoria y trabajo a su espalda. Espero que corrijáis ese error y prestéis atención a la que era promesa y ahora es realidad dentro del rock metal nacional. Un portento que ha ido mejorando y creciendo en todos los aspectos con cada disco. La banda asturiana ha ido conformando un sonido propio, metálico, crudo pero melódico, sumando técnica y poder visual sobre el escenario, comiéndose a muchas otras bandas y llegando a ser un claro ejemplo de trabajo y tesón, haciendo norma «de quien la sigue la consigue».

Tienen todo para convertirse en un referente, más de lo que puede ser ahora, que ya es decir, porque son muy pocas las bandas que en estos momentos, sin tener un nombre de los 90 son capaces de llenar salas como Penélope y crear una repercusión que levanta los sentidos.

Todo eso quedaba reflejado en un directo portentoso, sin altibajos, forjando más leyenda gracias a unos señores temas, sí, pero apoyados en un directo portentoso. Los riffs y crudeza vocal de Pepo marcan un ritmo más duro actualmente que junto a la melódica pero personal voz de Pablo dan rienda suelta a una base instrumental crudísima pero de ritmo pegadizo. Imponente y complicado acercarse a las primeras filas, un ciclón y patadas voladoras inundan el centro de sus conciertos que se pierden el locura con temazos del calibre de “Cuando salga el sol” abrumadora, bajo esa actitud de “voy a comerme el mundo” que atesoran sobre las tablas.

Sonido poderoso y volumen brutal para ensordecer a base de “golpes” musicales arriba y más aún abajo en “Contra la pared” o “Ritual”. El rock directo y enérgico de “La noche” destapa la calidad excesiva de la formación, que posee la tendencia y pose musical de bandas americanas, capaces de competir de tu a tu con creces con grupos de fuera.

Todo en ellos supura energía y rabia, esa que acongoja y se pega a tu cuerpo en la crudeza de “Los mineros” y que en sus temas con gaita hacen honor a su tierra, sacando a relucir esa exquisitez y diferenciación que no busca solo la agresividad si no la diversidad y afianzamiento terrenal de quien reivindica de dónde es.

Momento de dejar a Pablo a solas con nosotros para brindarnos un espectacular y emocionante “Batalla final” de lo mejor de su último “Buen viaje” creando una sinergia y trato con el público impecable, antes de entrar la fuerza vocal de Pepo y la poderosa base de la banda. “Pánico en Frankfurt” y “África” o temas tan “especiados” musicalmente y de base americana como “Trompetes de xericó” que invita al pogo más bruto hacen ver su versatilidad, mientras su dos cantantes nos comen, dos voces diferentes en un juego vocal impecable, bien sujetado por una base instrumental y técnica depurada de quien sabe hacerlo, como quien está tocado por una varita, esa que contagia y “embruja” a un respetable que desde el primer minuto al último empuja y alza los brazos con ellos.

Recta final con la poderosa y rauda “La tormenta” nuevamente con toda la complicidad de la sala mientras en sus últimos temas y por orden, Pepo y después Pablo guitarra en mano se mezclarían entre nosotros para saborear la “lucha” musical imponente de empujones y fuerza para despedir con “El último hombre” con el listón muy pero que muy alto.

Lo que antes decía, no puedes perdértelos la próxima vez, pecado no conocerlos e importante conocerles ahora. DESAKATO es su nombre, la actitud y técnica americana su forma, la fuerza y calibre internacional, capaces de pisar cual Espartacos del rock musicales a muchos otros supuestamente grandes. El relevo está aquí, de ti depende sumarte al mismo o quedarte atrás, pero esta, señores, es LA TORMENTA PERFECTA.

Texto y fotos: Miguel Rivera