EVANESCENCE – «Evanescence»

EVANESCENCE – “Evanescence”

Wind Up, EMI

Puntuación: 8/10

Quien pensara que EVANESCENCE había sido grupo de sólo dos discos sin mucho más que decir estaba muy equivocado y para los más escépticos la cantante Amy Lee hace de su nuevo trabajo el mejor ejemplo de ello.

Como si de un renacer se tratara, la vocalista de Arkansas escudada en el guitarrista Terry Balsamo ofrece un tercer trabajo homónimo que no deja lugar a la duda. Una inmensa obra muy superior a su antecesora y en un ámbito mucho más heavy que su debut, la formación cuaja un disco contundente, con sus bellas baladas, medios tiempos y temas poderosos, bajo una producción impecable y por supuesto la excepcional y envidiosa garganta de su líder.

«Evanescence” es un disco para escuchar muchas veces, ampuloso y sinfónico, gótico en su justa medida y lleno de registros y arreglos a tener en cuenta. “What You Want” sirvió de single moderno y contundente dejando ver su nueva línea rockera, muy al estilo Lacuna Coil. La pesadez de guitarras la encontramos en “Made of Stone” un tema más oscuro y pesado que quita el hipo a aquellos que veían a la banda de modo comercial.

“The Change” bien podría firmarla Within Temptation, uno de sus mejores temas en formato medio tiempo in crescendo que explota un estribillo pegadizo. El piano surge esplendoroso en “My Heart is Broken” donde Amy se mueve perfecta, un engaño que muestra lo sinfónico de la banda, peliculero en formato y grandilocuente.

“The Other Side” tira de cuerpo vocal y guitarras metálicas, y todo sabiendo administrar unas estrofas que no son duras, mientras que “Erase This” recupera la esencia más viva de la banda, fuerza y riesgo vocal en uno de los temas más aguerridos y espectaculares sin duda. La vena melancólica y preciosista de sus comienzos la encontramos en “Lost In Paradise” y como siempre Amy Lee se muestra, sentada frente a su piano, como una de las compositoras de lentos más inquietantes y bellas del rock moderno. Una fusión vocal e instrumental que respira profundidad capaz de poner los pelos de punta en la grandiosidad de su estribillo.

Después de enamorarnos regresa a la fuerza en “Sick” y las composiciones embriagadoras y oscuras como “End Of The Dream” otra partitura de la que aprender por muchas bandas góticas y en “Oceans” donde explota terrenos más modernos y electrónicos, moviéndose igual de bien para aplastarnos de qué manera con “Never Go Back”. La guitarra de Balsamo sirve para reivindicar su puesto en las listas heavies más duras para cerrar el disco con un lento como “Swimming Home”, dulce, místico y profundo que supone el feliz viaje final con el que terminar de manera sobervia.

EVANESCENCE retoma el pulso y con ello el vuelo para decir más alto que nunca que su voz nunca debe dejar de oírse. Amy Lee factura un disco compacto y genial en todas sus líneas demostrando ser una referencia para las múltiples copias del mercado.

Miguel Rivera