ARDE BOGOTÁ

Sala La Riviera, Madrid 23/06/2022

Lo de Arde Bogotá es ese fenómeno que muchas bandas desearían y que solo unas pocas elegidas consiguen. El cuarteto de Cartagena ha conseguido, con tan solo un primer disco, «La noche«, afianzarse en la escena nacional a medio camino entre el rock y el indie, abriendo la puerta entre diversos oyentes a base de un conjunto de canciones que, a través de la noche, cuentan situaciones con las que identificarnos.

© Miguel Rivera

Amor, fiesta, dolor, crítica social de una generación milleniall y otros temas hacen que nos sintamos cercanos, con la gran voz de Antonio, el que fuera invitado podcast #VOCESdeRockTotal liderando la profundidad, oscuridad y energía de su conjunto de canciones, con aquel single inicial que vio nacer aventura musical aplaudida, «Antiaéreo».

Es tal el nivel que varias marcas han apostado por ellos, siendo en esta ocasión, además de los festivales, la plataforma Vibra Mahou, la que ha apostado por una gira con ellos este año.

© Miguel Rivera

Es así como nos dispusimos a verles en todo su esplendor ya en una Riviera con cartel del sold out, un hito ya de por sí para una banda novel, con la que disfrutar de «la noche» de un jueves de inicios de verano.

Lo tenían claro desde el inicio con «Dangerous» y una explosión de júbilo inicial que ya se iba a mantener durante toda su actuación. Antonio García, con su profunda voz deja ver su talento en hits como «Cariño», una locura bailable en una desatada Riviera con tan solo el logo de la banda de fondo, para no distraer la atención del respetable y centrarnos en su música.

© Miguel Rivera

La intensidad que desprenden es maravillosa, digna de destacar, porque todos ellos funcionan como uno, y la piña que hacen con el público es total, desde el pulso mayúsculo de «A lo oscuro» al ritmazo desenfrenado de «Tijeras». Pocas veces un grupo consigue esa comunión invitando a los saltos en masa desde sus primeros temas, y no solo de «Millenial» vive la banda, porque ahí nos juntábamos un público variado, recibiendo con las manos abiertas ese tema crítico de una juventud asfixiada con su futuro en entredicho.

Nos íbamos a «El dorado», brillando con una banda que es oro puro, para recuperar ese rock electrizante y oscuro de «Big bang», al incentivo y guiño retro de «Mi carro» de Manolo Escobar, tan bien recibida como si fuera suya, para volver de nuevo a su EP «El tiempo y la actitud» con las cambiantes «Virtud y castigo», calmando los tiempos y «Te van a hacer cambiar», igualmente aplaudidas que el resto del repertorio.

© Miguel Rivera

En esa tesitura de caras felices y gritos en alto, bajo aplausos ensordecedores, seguíamos con el puño en alto, saltos y coros en comunión para esa recta final tremenda. La belleza intensa de quienes nos transportan a su particular «Exoplaneta», al rock poético de «Antiaéreo» que como no podía ser de otra forma, es un cañón, una canción para un grupo privilegiado y afortunados nosotros de ver un directo de esta envergadura, sin venirnos nunca «Abajo», el tema que cerraba una actuación notable de las que marcan al público y que suponen un nuevo espaldarazo para una de las bandas de rock del momento.

© Miguel Rivera

Arde Bogotá lo tienen todo, estilo, canciones, gusto, melodía, tremenda intensidad sobre el escenario y una conexión con su público que convierten «La noche» en la noche de nuestras vidas, en lo que es un nuevo rock de alta intensidad, rozando el crossfit musical. Aterrizamos de nuevo hoy al planeta tierra tras un viaje alucinante a un «exoplaneta» de una formación de potencial desbocado.

Texto y fotos: Miguel Rivera