CARLOS SADNESS «Tropical Jesus»

CARLOS SADNESS “Tropical Jesus”

Sony Music

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Tanto para el que conozca o no a CARLOS SADNESS hay que decir que el cantante catalán ha forjado su nombre con una clara sintonía tropical, donde las playas, los amores, la fruta fresca y otros muchos elementos dan formato a unas canciones de sello propio, místicas a veces, vivas en otros pero relacionadas todo en torno a dibujos musicales muy personales, con su terminología para crear una vida instrumental y lírica que, junto a lo visual, hacen un todo para un diseñador de dibujos y canciones.

Desde siempre ha cuidado cada cosa que hace, tanto en lo musical como en lo ilustrado. Es así como, con los años, ha conseguido que su nombre se convierta en uno de los grandes referentes de la música nacional.

Manteniendo esa esencia tan característica y propia, tanto en lo vocal y lírico como en su música, llegamos a un cuarto disco “Tropical Jesus” que viene a contar, como en otras ocasiones, circunstancias e ideas que surgen en su cabeza a raíz de sus muchos viajes por Latinoamérica.

Si es “Diferentes tipos de luz” su anterior obra el dibujo tropical era una máxima, aquí sigue esas directrices pero marcadas por menos guitarras y mucho más beats, con espacio para acelerar o reducir su velocidad, sus juegos de palabras y hablar de elementos de amor con su estilo personal y enriquecedor.

El resultado puede que haga que estemos ante su mejor obra, su disco más rico en todos los sentidos, cada uno elegirá si lo es o no, le dará sentido y significado pero, seguro, nos dejará clara su reinvención sin perder nunca esa esencia que es parte ya de su legado. 

Brilla en un cancionero de 13 temas, algunos ya conocidos de antaño, como su hawaiano “Aloha” y su deliciosa y pegadiza “Isla Morenita” con su fiel compañero el ukelele, capaz de reírse del “mal tiempo” y hacernos disfrutar en un momento idóneo para un disco como el que nos ocupa.

Como decía hay espacio musical para todo, con una apertura deliciosa, curiosamente algo más intimista en forma “Ciclo lunar”, de factura sumamente bella en su espacial ciclo lunar de estribillo. “Chocolate y nata” tiene ese deje lento y enamoradizo con otra parte central en la que mezcla helados, luna y sol, México y Alaska, unos contrastes para hablar de alguien distinto que en el fondo es lo mismo, pasando por “El simpático” con Dr. Witchdoctor muy del estilo entre ambos. 

Un “chicle” refrescante como “Clorofila” la canción de ukelele y voz, muy intimista y la gran lenta de un álbum del que ya habremos disfrutados de dos hits: “Me desamaste”, un ejemplo de la capacidad del músico para hablar de un desamor o antigua relación de una forma brillante, con un ritmo beat bailable y explosivo estribillo que, os aseguro, vais a tener en la cabeza mucho tiempo. No menos cuando viaja con Manuel Medrano a otras latitudes, bañando de un ritmo más urbano y latino un tema diferente, una historia de amor, de recuerdos, de descubrimiento, de palabras y de “lo bonito que sería volver donde nadie vuelve”. Magia. 

La parte más indie la podemos encontrar en “Muerte súbita de un caimán” y descubrir que Carlos “Jisus” no es de ningún lugar “El gringo” un dulce lento para degustar tranquilos, de parar el tiempo, disfrutar, pensar. 

Hay otras piezas que descubrir, que escuchar muchas veces y bailar, porque ante todo, “Tropical Jesus” es un delicioso caramelo tropical “desnudo”, de historias creadas en sus viajes y que llega en un momento idóneo para llenarnos, hacernos viajar, soñar, pensar, volver a nuestro pasado o inventarnos nuestro propio mundo a base de canciones. Un viaje musical del que debemos dar las gracias, un disco perfecto que disfrutar en un verano atípico al que él le pone su toque «divino». 

Miguel Rivera

 

Review

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4.8 (5 Votes)

Summary

8/10Score