RAZKIN

BUSCANDO EL NORTE

Bajo el nombre de Razkin, el guitarrista y cantante Pedro F. Razkin, comenzaba una aventura en solitario en el peor momento para la música. Antes del confinamiento lanzaba su primer disco, para ahora, con lo que parecen los últimos coletazos de la pandemia, editar su segunda obra «Norte». Un salto cualitativo que complementa una obra y un devenir inesperado, con su abrupta e inesperada salida de La Fuga, donde era su cantante y guitarra, para ahora, centrar todos sus esfuerzos ya en una carrera como RAZKIN en la que ya todo debe ir a mejor. Amante de los riesgos y las aventuras, Pedro nos cuenta sobre su momento, el de la música y de la sinceridad de su propuesta.

Lo primero es comenzar por esa salida abrupta de La Fuga para sorpresa de muchos, ¿cómo te encuentras?

Aunque suele ser lo que se dice, he de reconocer que me encuentro en el mejor momento de mi vida. La salida ha sido dura, no te voy a mentir, especialmente los primeros días pero lo que me encuentro por delante es maravilloso, poder trabajar con la gente con la que trabajo y con la libertad que tengo es algo impagable, y ahora mismo es lo que me llena de verdad.

A finales de febrero de 2020 lanzabas tu primer disco, junto antes del confinamiento, empiezando una carrera en solitario en el peor momento. Mirando en perspectiva, y con el segundo en la mano, hazme un balance de cómo ha resultado todo.

Las circunstancias son las que son, no hubiera cambiado nada. Sé qué el primer disco llegó en el peor momento de la historia reciente, pero también que de esa forma todo lo que viniera después iba a ser mejor. Este disco ya lo estoy notando, la respuesta de la gente es mejor, de los medios, de la música en general. En la anterior gira había cerradas 45 fechas que pintaban geniales y no se pudieron hacer, a excepción de alguna cosa en streaming, pero venía de terminar una gira de La Fuga. Ahora tengo muchas fechas siendo ya ex cantante del grupo, así que el balance es bueno.

En 2020 se sacaron discos que igual han quedado un poco en el olvido.

Sí, es probable y es lo natural. Cuando un disco se queda en la estantería y no tiene recorrido, primero con los medios de comunicación que le dais bombo al disco y después sin conciertos, pues tiene un poco a morir. Por eso este segundo disco “Norte” me lo tomo como un álbum doble, el primero y este, presentando en directo los dos.

Es una pena que se queden en el limbo algunos discos por la pandemia pero yo creo que se buscará la manera de recuperarlos y hacer protagonistas ahora en directo a esos álbumes.

¿Has encontrado el «Norte», aunque vivas allí?

Vivo en el norte y el norte siempre es necesario tenerlo para poder salir de él, para escapar. A mi me gusta mucho salir de la norma establecida, pero de vez en cuando es una necesidad tener ese norte, y el mío ahora es Razkin.

Creo que este disco es más completo, con diversidad musical y muy sincero, ¿has recolectado vivencias de tu vida?

Sí, totalmente. Escribir sobre lo que le sucede a uno es sencillo y al final lo que te ha sucedido a ti todavía más, y tenía ganas de esto. Aunque con La Fuga lo hice, ahora lo hago a mi manera y es reconfortarte contándolo como yo quiero y de la manera que quiero. Es una libertad que después de estar en una banda donde hay un corsé que hay que respetar, puedo disfrutar más de esa libertad actual.

“Norte” tiene un tema como «Normalidad» que habla justo de la situación de la pandemia, pero es una de las más vitales, ¿es un canto a recuperarse?

Sí, sin duda, esa canción la hice en pleno confinamiento y refleja que cuando peor estás parece que tenemos algo en la cabeza que nos empuja hacia arriba. Que curioso que cuando peor hemos estado me ha salido a mi la canción más alegre de mi vida, bailable y con toques funk, la verdad es que me ha sorprendido, nuestra propia cabeza nos rescata de la mierda.

“Ni amor ni mentira” ¿qué esconde, una relación rota?

Lo bonito de todo esto es que cada uno puede extrapolarlo a su entender, a sus vivencias. Sí, en principio es una relación rota, a veces se mantienen relaciones por el mero hecho de no dejarlas, cuando no hay mal rollo pero tampoco hay amor, de ahí viene “ni todo era amor ni todo era mentira” que dice la letra, y a veces estamos en ese limbo que no nos deja avanzar ni ser nosotros mismos.

¿Y la canción “La estación”?

Pues también la compuse en confinamiento, un día antes de hacer mi primer streaming por Instagram, quería hacer más temas nuevos. Ahora mismo no te sé decir cuando sentí eso pero sé que lo sentí yo. Hay veces que cuando tienes una especie de ruptura, o bronca o algo con los colegas, renacen esas vivencias anteriores que has tenido y hay un caldo de cultivo increíble para escribir canciones.

Tu fuiste claro y pulcro con el comunicado sobre La Fuga, ¿crees que fue interesado sacarlo en ese momento como indicó un antiguo compañero tuyo?

Al revés, creo que fui honesto. Yo llevaba dos meses antes anunciando el disco, no lo hice al día siguiente y había sacado ya tres singles. Lo que no quería hacer era meterme en una preventa de un disco mío y en una promoción engañando a la gente y pensando que yo seguía siendo parte de La Fuga. Quería dejar las cosas claras con la gente que me va a escuchar, que me va a ver y entrevistar.

Sigo manteniendo lo mismo, agradezco mucho todos estos años con ellos, he aprendido mogollón, y les deseo lo mejor como la Fuga.

«La cultura no es amiga de ningún gobierno porque la cultura te abre los ojos y te hace pensar, y eso va contra natura de cualquier partido político«

¿Es dura esa ruptura, como cuando rompes una pareja?

Totalmente, han sido doce años, es como una relación larga. Hemos pelado un montón, nos hemos divertido muchísimo, hemos pasado momentos duros, luchado mogollón entre todos, músicos, manager, equipo… esa ruptura es dolorosa porque no lo deseas, yo sí me veía grabando un futuro disco de La Fuga, pero ha surgido así.

La gente piensa que cuando vienes de una banda conocida está todo hecho. ¿Cómo se afronta la aventura?

Nada más lejos de la realidad, es un camino nuevo. A mi todo lo que han sido retos me han puesto mucho. Tanto cuando entre a La Fuga que estaba como estaba, y era levantar de nuevo la cabeza y lo conseguimos, como ahora, que es otro reto diferente, pero no significa nada haber pertenecido a una gran banda, voy a tener que luchar igual no desde cero, porque hay gente que ya te conoce, pero básicamente es el mismo curro. ¿Da miedo? Sí, pero me pone las pilas para trabajar más.

Durante este tiempo, ¿cómo has visto el panorama musical en Pamplona desde dentro?

Pamplona es reflejo también de lo ocurrido en este tiempo. La cultura, ha sido lo más abandonado, la cola del final y las medidas de ayudas nos han pasado cerca, pero a mi por lo menos no me ha tocado ninguna. Parece que la gente se acuerda de nosotros cuando estaba lo peor, pero cuando hay ayudas se acuerdan de cualquier otro gremio menos el de la música, que parece que no es un trabajo y solo es un hobby y es una asignatura pendiente de los músicos, técnicos… son trabajadores y muchas familias viven de eso. Ojalá la gente se acuerde ahora de las ganas que tenían de eventos culturales y que el público responda.

Al final en esto da igual quién gobierne y el signo político.

Desde luego, la cultura no es amiga de ningún gobierno porque la cultura te abre los ojos y te hace pensar, y eso va contra natura de cualquier partido político. Mientras tengan a la cultura controlada y bajo una sombrilla pues mejor para ellos, no interesa abrir los ojos a la gente porque una canción ya
es un discurso que como un libro te hace pensar, y despertar las cabezas a la gente no les interesa.

Imagino que sonarán los dos discos en directo.

Sí, lo interpreto como disco doble, el que quedó en pandemia y este nuevo álbum, además hay una evolución pero se ha trabajado de la misma manera, quizás «Norte» es más maduro con otro prisma porque hemos ensayado juntos y hemos hecho más piña.

Qué esperas del próximo año como Razkin?

Espero que el crecimiento en 2022 sea exponencial a dejar de tener restricciones, vamos a terminar el año por todo lo alto en Teatro Gayarre en Pamplona con invitados el 30 de diciembre, y espero que ese fin de año tan grande sea un comienzo de año con un escalón más. El 27 de noviembre también actuaré en Madrid en la sala 0 con la nueva normalidad al 100% de aforo, y es otro bonito reto.

Para terminar, que Kutxi colaborara en la versión de «La leyenda del tiempo», ¿lo tenías claro?

Sí, siendo una canción de Camarón tenía claro que tenía que ser Kutxi. Cuando se lo comenté sobre el tema me dijo “ojo, cuidado con eso que hay que hacerlo muy bien para que no se nos eche el mundo encima” y al escucharla en el estudio se metió de lleno.

Miguel Rivera